Hay muchos testimonios de periodistas independientes que atestiguan hasta donde puede llegar el nivel de estos abusos, pero parece ser que la comunidad internacional no les da suficiente credibilidad, acaso por ser cubanos, si no eres un exiliado o tienes pasaporte de otra nación no tienes la suficiente credibilidad, bien vamos a ver que tal andan de pantalones los periodistas extranjeros.
Les voy a explicar como pueden comprobar de primera mano que existen redes de prostitución infantil fácilmente accesibles en La Habana, el que tenga redaños que lo compruebe y lo publique.
Lo primero es conseguir una visa de turista y hacerse acompañar de algunos amigos para pasar desapercibido, un par de periodistas tendrían una sombra sin salir del aeropuerto y no les abandonaría hasta agarrar el avión de vuelta.
Una vez en La Habana pueden elegir un hotel de cuatro o cinco estrellas, cualquiera valdrá, dependiendo de su nacionalidad les orientarán hacia unos u otros, algunos de la compañía que gestiona el hombre del traje gris, que funge como Virrey de La Habana Vieja, serían muy adecuados para la labor.
Después de un par de días disfrutando de los encantos preparados, ad hoc, para los turistas probablemente tengan, a base de propinas, buena relación con alguien del hotel o con algún taxista. Si como por milagro disfrutan un par de veces o tres del mismo taxista, no lo duden, ese es su hombre.
Seguramente colaborará o formará parte de la seguridad del estado, si el periodista es conocido no habrá ninguna duda.
Una vez que tengan confianza con él ya les habrá ofrecido chicas o chicos de todos los colores y condiciones. Si delicadamente le expresan que buscan algo especial, un bombillo se le encenderá, los pedidos especiales dejan una comisión tremenda.
Dejando traslucir que les gustan las chicas jóvenes el taxista ya se habrá orientado perfectamente y les remitirá a un amigo suyo, este el que gestiona el negocio, contará con los contactos necesarios en la seguridad y o la policía para desempeñar sin trabas su labor, una vez que se haya convencido de que no son peligrosos probablemente les llevará a un lugar donde comprobar el material.
El material no consiste en otra cosa que unas niñas asustadísimas que los mirarán como si fueran un salvavidas. El motivo es que esperan que ustedes les adopten o se casen con ellas y las saquen de ese infierno. Es el cuento que les venden a los infantes, si os portáis bien a lo mejor os llevan al extranjero, los que no son complacientes son duramente castigados, bajo estas amenazas y esta violencia los díscolos no existen, la voluntad está completamente doblegada.
Pueden ir todavía más lejos para comprobar la falta de escrúpulos de estos individuos, si hablan de algo más especial todavía y si solicitan una "nueva" podrán comprobar el precio que tiene una virgen menor de edad, tres mil fulas tienen la culpa, les pedirán seis mil, pero aceptarán la mitad.
Una vez acordado el precio deberán negociar las condiciones, el tiempo, cuantos van a disfrutar de ella, si les permitirán monitorear la sesión, todas estas felonías son negociables, ante esto último lo más probable es que el precio vuelva a aumentar, luego les expresarán con indignación que no permitirán que las caras aparezcan en la grabación o las fotos, es común que al supervisar el material aludan que se podría reconocer al menor y se apropian de la grabación para comercializarla por otra vía con lo que las ganancias se incrementan exponencialmente.
Después de haber llegado a un acuerdo fijarán la cita, una vez llegado el momento pueden aducir que no es lo que buscan, el enfado del esbirro explotador será tremendo pero con algunas fulas pueden calmarlo y salir de allí directamente al aeropuerto.
Existen medios técnicos que pasan desapercibidos para monitorear esta actividad para que no quede ninguna duda de que los hechos que narrarán después se atienen estrictamente a la realidad, de sus pantalones, estomago y su pericia depende el resto. De esta manera podrán comprobar el nivel de depravación que existe entre el aparto represor castrista que se beneficia de toda actividad que se considera ilegal.
La repugnancia, inquina, impotencia e indignación que siento al narrar estos hechos que ocurren a diario en mi patria solo es superada por la que sufro por las mentiras que a diario los voceros del régimen tiránico dispensan a los medios internacionales y que son creídas por la mayoría del público extranjero; todo es mentira, Cuba es un infierno y vivir en él es una maldición, quien les diga lo contrario solo miente porque espera sacar un beneficio a cambio.
Excelente nota y denuncia ,lo puedes ver publicado en mi blog .
ReplyDeletehttp://adribosch.wordpress.com/2012/11/12/abuso-y-prostitucion-infantil-en-cuba-por-oswaldo-yanez/